El jefe de investigación del Instituto para el Desarrollo Social de Argentina (IDESA), Jorge Colina, advirtió este miércoles que existe una alta carga impositiva para los trabajadores, a diferencia de los países centrales.
"El problema no es pagar Impuesto a las Ganancias, sino que en Argentina el pago impositivo se duplica", sostuvo Colina.
En diálogo con el programa radial ¿No será mucho? de MDZ Radio, el economista indicó que considerando los aumentos salariales obtenidos en las paritarias y de no mediar una modificación de los parámetros, va a crecer más la cantidad de trabajadores alcanzados por el tributo.
"El diario La Nación hace una proyección al ritmo que están creciendo los salarios en un 28 por ciento interanual si no se modifican los parámetros de ganancias llegaremos a una instancia donde un trabajador con el salario promedio puede estar alcanzado por el impuesto; en particular, un trabajador soltero", explicó Colina.
Según sostuvo el investigador de Idesa, en todos los países avanzados se paga el Impuesto a las Ganancias. Sin embargo, advirtió Colina, el trabajador no está obligado a hacer aportes personales.
"En el concierto internacional uno encuentra que en los países avanzados, los asalariados pagan impuestos a las ganancias desde salarios bastante bajos; tales son los casos de países como Australia, Nueva Zalanda, Dinamarca, Canadá", indicó.
En Argentina, el punto es que los impuestos se duplican; es decir, los trabajadores ya vienen pagando aportes personales que son altos y ahora se le suma el impuesto a las ganancias", especificó Colina.
Detalló que, el trabajador de nuestro país paga cerca de un 20 por ciento de aportes personales y, encima, debe abonar un porcentaje por Ganancias.
En otro orden de cosas, precisó que negar la inflación, en este contexto, repercute seriamente en el salario promedio.
"Las provincias que tienen la inflación diferente al INDEC arrojan que la inflación estaría siendo de un 23 a 25 por ciento por año esto significa que la inflación mensual es de 1,5 por ciento por mes; entonces, cada vez que se atrase la actualización del salario estaría perdiendo en promedio 1,5 por ciento de su capacidad adquisitiva", puntualizó.
En esa línea, señaló que no hay política menos progresista que aquella que niega y desconoce la inflación.
"La verdad es que la política más regresiva que existe es la inflación porque le pega muy fuerte a la gente de ingresos fijos a los trabajadores y jubilados y el hecho de esconderla no le quita regresividad", resaltó.
"Estamos negando un problema serio; Latinoamérica siempre ha sido una región de inflación muy alta e histórica; sin embargo, en esta década, observamos que es extemporáneo hablar de inflación en países vecinos como Chile, Brasil, Uruguay, Perú donde tienen inflaciones del 6 por ciento anual donde para nosotros eso puede ser de tres meses", advirtió Colina en diálogo con ¿No será mucho?
Finalmente, indicó que la política del "control de precios" no puede ser tomada como una medida de base de un plan antiinflacionario. Postuló que se trata de un política "coyuntural" y "transitoria" que no solucionará el problema de fondo.
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